Dejamos la capital y nos dirigimos hacia la Meseta de Bolaven, unas de las zonas más bonitas de Laos, con unas cascadas espectaculares en un entorno no menos espectacular. El traslado es largo, cerca de 11 hora en bus pero, aunque parezca imposible, se hace ameno. Los buses que unen Vientián y Pakse son nocturnos (Sleeper Bus, de 21,30 a 06,30) y tienen camas dobles para descansar. Sí, dobles. Nosotros somos pares y no hay problema, pero si vas solo o en grupo impar, que sepas que tendrás que compartir cama con otro viajero o viajera. Es muy curiosa la situación, porque delante de nosotros iba un chico alemán y al rato se subió un inglés. Se saludaron, se dieron la mano, charlaron un rato, y al cabo de media horita pusieron culito con culito y a dormir jajajaja. Imaginamos que los responsables otorgan las plazas por sexo, para no violentar a nadie. Si tienes dinero suficiente, puedes reservar las dos plazas para ti. El precio del bus es de 19€ aprox.
El bus llega a la ciudad de Pakse, donde puedes hacer alguna noche o directamente dirigirte a la Meseta de Bolaven. Nosotros pasamos el día tranquilos en la ciudad y al día siguiente alquilamos unas motos para ir a Paksong, el pueblo en el centro de la Meseta, que se encuentra a unos 40 kms.
El principal atractivo de la Meseta son las numerosas y preciosas cataratas que salpican el lugar. Un recorrido habitual (si dispones de al menos 2-3 noches) es alquilar una moto y coger la carretera 16 desde Pakse y recorrer la meseta hasta la carretera 20 que vuelve al lugar de origen por el norte. El recorrido completo son unos 200 kms, pero la carretera no es de primera ni segunda categoría, y puedes tardar unas 4 horas, sólo de traslados. Nosotros optamos por la ruta corta que va y vuelve por la carretera 16, invirtiendo una hora de ida y otra de vuelta. Hicimos noche en un lugar espectacular: el único hotel en el que puedes divisar desde la terraza la catarata gemela TAD FANE (tad significa catarata en laosiano).
Es muy buena idea hacer paradas durante el camino, porque la gente es muy simpática y amigable. Recomendamos parar en algún puesto de carretera a tomar un refrigerio o un café y charlar con la gente local. Estupenda.
Visitas en la Meseta de Bolaven:
Como ya os hemos dicho, el atractivo son las cataratas y estas son las que nosotros visitamos, aunque la lista es mucho mayor: Tad Champee, Tad E-Tu, Tad Fane, Tad Yuang y Tad Phasouam. En estos lugares suele haber un pequeño restaurante o bar donde reponer líquidos o comer.
Alojarse en la Meseta de Bolaven:
Hay muchos sitios en la meseta para alojarse porque es un lugar turístico. Nosotros hicimos una excepción en nuestra habitual austeridad y nos dimos un homenaje en el Resort Tad FANE. Pagamos 40€ la única noche que pasamos allí, con un fabuloso desayuno y sobre todo, las vistas a la catarata gemela. Como dijo aquel célebre torero, en dos palabras IM-PRESIONANTE.
Alojarse en Pakse:
La breve estancia que hicimos en Pakse estuvimos en el Alisa GH, por 19€/noche con desayuno y baño privado.
Comer en Pakse:
Mucha oferta de todo tipo, comida local y occidental a precios diversos. Si tuviéramos que elegir uno, os recomendamos el Athenas en Pakse, un restaurante de nivel medio/alto, donde puedes comer por 4-5€/persona. Un poco más caro que el resto pero con mucha variedad y buena cocina. Hicimos amistad con Land, un camarero medio laosiano-medio tailandés y exboxeador de tai-boxing. Muy simpático, estuvo enseñando a Freddy jr las artes de su especialidad. Sinceramente, poco acorde con nuestros valores pero bueno, anecdótico.
Por supuesto, no olvidarse de la respostería francesa de las pastelerías Paris. Uhmmmmm!!!
Puedes ver más fotos de la Meseta de Bolaven en nuestro Google Fotos.
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